En el currículo, en el proyecto, en la práctica educativa, enseñar a degustar un cuento debería estar definido por un verbo “provocar“.
Aprender a leer con deleite es un proceso que comienza con la vida misma.
- Se provocan los ojos, los oídos, la piel…
Fijar la mirada, mantener la atención
unos segundos, escuchar el sonido de tu voz, sentir el placer de la
comunicación. Así empieza el proceso.
- Se provocan los ojos, los oídos, la boca…
Seguir con la mirada, llevarlo a la
boca, disfrutar con el sonido del relato, intercambiar gestos. Sentirse
suspendido de la magia. Seguimos.
- Se provocan los ojos, los oídos, la boca, las manos, la piel, el corazón…
No poder despegar la mirada de las
ilustraciones, pasar las páginas con fruición, intentar reproducir
gestos y palabras. Buscar el calor de la narración. Estamos aprendiendo a
vivir un cuento.
- La provocación de la satisfacción…
Sentirse inmerso en una nueva y mágica
atmósfera, mostrar alegría, sorpresa, inquietud, ilusión, ternura.
Identificarse y quedar suspendido de la historia hasta desear que nunca
se acabe. Descubrir otros mundos, los que sólo existen en tu
imaginación.
Y esto no ha hecho más que empezar.
Esos seres diminutos tienen todo un mundo por delante. Los chicos se
merecen el regalo de poder despertar sus sentidos a la lectura ¡Provoca la lectura!
Enhorabuena por tu proyecto. Estoy pensando en colaborar junto con mis alumnos de segundo de ESO pero me está costando "venderles" la idea. ¿Algún consejo?
ResponderEliminarSegundo de ESO es un curso ideal para participar en el proyecto. Propón que ellos mismos se graben y si salir solos le provoca vergüenza que preparen un guión por parejas o en grupos.
ResponderEliminar¡ánimo!
Colores Saltarines me ha traído grandes recuerdos, porque mis hijos, cuando eran bebés, solían leerlo, o más bien se lo leía yo a ellos en la cama, y aún conservan la colección completa, es preciosa. Muchas gracias por la recomendación
ResponderEliminarMuchas gracias, en primer lugar a Kuentalibros por ser un proyecto tan atractivo y motivador y que nos ha dado la oportunidad de compartir nuestra "especial manera de leer". Y a vosotras, Mª José y Mª Jesús, por vuestro comentario. Pienso que nosotras, las educadoras de infantil, lo tenemos más fácil. Los niños del 0-3 son absolutamente receptivos a todo lo que el adulto proponga, especialmente si es lúdico y despierta sus sentidos. Los cuentos reúnen todos los ingredientes, color, sonido, texturas. formas... magia y calor¡Son nuestros grandes aliados! Y de la colaboración con las familias hemos hecho este curso la principal propuesta educativa en la escuela. Trabajamos la participación de los padres con la finalidad de lograr una escuela abierta que nos aporte a todos, sobre todo, a los chicos. Abrazos y besos :)
ResponderEliminarKuentistas, me encanta vuestra página, sencilla, fresca y de un solo golpe de vista.....y la he incluído en la que estoy elaborando.
ResponderEliminarRuego sugerencias, si queréis echarla un vistazo
www.wikilibros.net
Gracias